AGRUPACIÓN POR EL
ESCLARECIMIENTO DE LA MASACRE IMPUNE DE LA
AMIA
STIUSSO Y MILANI COMPARTEN SECRETOS
STIUSSO Y MILANI COMPARTEN SECRETOS
Las recientes declaraciones del mandamás de la ex SIDE, Jaime Stiusso, y su enfrentamiento con el gobierno desencadenaron una nueva crisis política. Sin embargo, su salida de la Secretaría de Inteligencia (SI) no termina de resolverla.
Los periodistas interpretaron que Stiusso
enfrentó al gobierno en base a tres cuestiones: el manejo que la SI hizo de los
jueces federales, la “guerra” de internas, y el temor a sufrir un
atentado. El conocimiento que mostró acerca del atentado a la AMIA y el
Memorando con Irán fueron interpretados como una carta de extorsión.
Cuando el periodista le preguntó: “¿Quién
atentó contra la AMIA?”, Stiusso respondió: “Esos temas son secretos de
Estado. Yo no te puedo decir a vos quién voló la AMIA, porque yo dependo
de lo que tengo que informar a la Justicia….”.
“Pero Usted sabe quién voló la AMIA?”. “Yo tengo que laburar y presentar
las cosas. Eso no te lo puedo decir a vos.” (Revista Noticias
13/12/2014. Destacado por APEMIA)
El hasta ayer responsable de la inteligencia
nacional reconoció que el atentado a la AMIA sigue siendo un Secreto de Estado.
Con una sola frase admitió que no hay investigación que valga. Bien mirado,
tampoco acusó a Irán como sí lo hizo en el pasado, relativizando así la
importancia del Memorando en sus disputas con el gobierno nacional.
Desde entonces, Stiusso no fue desmentido
desde ninguna oficina del poder. Por el contrario: pese a las tensiones de la
“interna”, los secuaces de Stiusso y Milani cierran filas para proteger esos
secretos de Estado y continuar garantizando la impunidad del atentado.
Por esta razón, sus dichos y el consentimiento tácito de los nuevos
funcionarios de gobierno son de una enorme gravedad...
En apenas tres palabras, Stiusso resumió el
papel del Estado nacional durante los últimos veinte años. En defensa de los
“Secretos de Estado” los sucesivos gobiernos promovieron y consintieron toda
clase de maniobras: armaron juicios fraudulentos que aseguraron la libertad de
todos los imputados, prometen nuevos juicios por encubrimiento, manipulan
supuestas investigaciones internacionales y acusan -o dejan de acusar- a Siria y/o
Irán. Todo ello con la complicidad de la dirección de DAIA/AMIA y los grupos de
familiares integrados a las distintas políticas del Estado.
El sólo hecho que, después de veinte años,
quien dirigió la ex SIDE reconozca oficialmente que aún existen Secretos de
Estado y que nadie lo desmienta, explica por sí mismo el papel criminal del
Estado argentino en la comisión del atentado y en su posterior encubrimiento.
Los dichos (y hechos) de Stiusso ratifican
que, con el gobierno de Kirchner, continuaron las políticas que dieron lugar a
la “vergüenza nacional” que prometían superar.
¿Acaso el recambio en la dirección de la SI
modifica esta situación?
No. Al igual que Stiusso, la nueva dirección de Milani/Parrilli/Mena no
cuestiona los Secretos de Estado. Milani, imputado por la desaparición del
soldado Ledo, guarda el secreto de las responsabilidades que tuvo el Ejército
en el atentado terrorista de Río III. Mena, a quien se presenta como conocedor
de los detalles de la causa AMIA, no vino a deschavar viejos secretos sino a
“apretar” jueces y habilitar nuevos secretos.
En su carácter de ex Secretario del Ministro
de Justicia, Mena no es un novato a la hora de manejar jueces. Un día antes de
que Stiusso abriera la boca, Mena le exigió a la Cámara de Apelaciones
investigar el papel del ex ministro Corach en el encubrimiento del atentado a
la AMIA. Sin embargo, el Estado al que él representó en la audiencia sigue sin
entregar las pruebas aún secretas de esa acusación. ¿Las aportará ahora como
interventor de la SI, cuando Menem es un aliado privilegiado del kirchnerismo
para no ser acusado en ninguno de los tres atentados terroristas cometidos bajo
su mandato?
Meses atrás, Mena y Alak negociaron con los
jueces de la Cámara Federal salvar a Boudou del procesamiento que iba a
dictarle el juez Lijo, a cambio de aceptar la inconstitucionalidad del
Memorando. Este “acuerdo”, que contaba con el visto bueno de AMIA y DAIA,
fracasó ante la denuncia pública de que se preparaba una maniobra contra Lijo
(ver diarios La Nación y Clarín del 01/06/2014).
La crisis política del gobierno con los
espías actualiza brutalmente la impunidad en la masacre de nuestros familiares
y amigos en la AMIA. Bajo la dirección única de la Inteligencia en manos de
Milani, la nueva conducción de la SI no viene a abrir los archivos de los
atentados a la AMIA o de Rio III, sino a reforzar el Secreto de Estado y el
encubrimiento.
Desde APEMIA exigimos la constitución de una
CONADEP de la AMIA.
Propusimos constituir una Comisión Investigadora en el ámbito
parlamentario con acceso irrestricto a los archivos secretos para determinar
las responsabilidades nacionales e internacionales que correspondan por la
comisión de este atentado terrorista de Estado, y su posterior encubrimiento.
El debate por la creación de esta Comisión está siendo bloqueado tanto por el
gobierno de Cristina Kirchner como por los opositores Massa y Macri y las
direcciones de DAIA y AMIA. En soledad, el gobierno que reconoció la
responsabilidad del Estado como encubridor agravado del atentado (Decreto
812/05), defiende el Memorando aún a sabiendas de su inutilidad para el
esclarecimiento del crimen. Por su parte, Macri y Massa buscan un compromiso
con el kirchnerismo para armar juicios en ausencia que terminen exculpando al
Estado argentino y acusen a los imputados iraníes.
Unos y otros se oponen a terminar con los
Secretos de Estado, a esclarecer los hechos por la vía de la apertura de los
archivos secretos y a una investigación independiente como único camino para
conocer la verdad.
Buenos Aires, 20 de diciembre de 2014
APEMIA
http://apemia.blogspot.com.ar/